Dime a dónde has ido - Mayor Arias

 


Maribel Orgaz @leerenmadrid
"Era Doña Mayor Arias", comienza el estudio de Mª José Sánchez Romate medievalista de la Universidad Complutense, "una dama noble, casada felizmente con Ruiz González de Clavijo".

Vivían en Madrid y él, camarero de Enrique III, fue enviado por el rey a Samarkanda, en el centro de Asia, para corresponder a la embajada que Tamorlán, Rey de Persia, le había hecho llegar después de la victoria que el caudillo asiático logró sobre el sultán Bayaceto. 

Hacia 1403, desde el Puerto de Cádiz, Ruiz González de Clavijo se embarcó como jefe de la expedición. Volvería tres años después.

Mayor Arias compuso en su ausencia una cantiga a su "amor querido", a su esposo, "de gentileza que enamora y honradez que engrandece". En el poema, resume la vida de ambos, "rica y sosegada" y se dirige a un mar conmovido por sus quejas.

Imagina peligros y escribe sobre su incapacidad para no hacer otra cosa que rogar. Habla con ternura "sentimiento tan poco común dentro de la literatura española", del esposo. 

Esta dama culta, en un estilo sencillo y cercano, en una sociedad de guerreros, declaraba en sus versos que sólo pretendía una cosa: "ver entrar por la puerta a Ruy González".

A su regreso, él ya no intervino en hechos públicos relevantes. Fueron padres de tres hijos. 


Tenía mis amores

que había conocido,

gentil más que las flores.

Honrado marido

por servir señores

dime a dónde has ido

Mayor Arias 



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Bailando en la pradera - Una fotografía de Julián Collado



La dulce aparición de la Felicidad - Profesor H. Ridley

 


El profesor H. Ridley, de quien no he logrado conseguir más datos, publicó en 1915 un ensayo-recopilación histórica sobre la creencia desde los tiempos antiguos en la capacidad de la magia para lograr conquistar a la persona amada.

El autor reconoce que tituló a su compendio, La ciencia del amor por que era más eufónico y sugestivo y describía mucho mejor su fin "la dulce aparición de la Felicidad y los medios para conseguirla".

Ridley aclara desde la primera página que no ha perdido el tiempo escribiendo un estúpido tratado de hechicería, ha realizado una síntesis de lo que durante siglos hombres y mujeres han intentado para "hacerse amar de una persona que se muestra indiferente y fría".

Más allá de talismanes y contra-filtros que el autor atribuye a supersticiones del pasado, su fe como hombre de ciencia moderno se basa en el mentalismo y el magnetismo "la Magia de nuestros días".

Y el profesor Ridley reúne en la segunda parte de su libro conceptos que cien años después nos son familiares: voluntad, perseverancia, entusiasmo, convicción.

Cómo escribir una carta, cómo concentrar las fuerzas del espíritu. 

"Para triunfar", afirma, "sin recurrir a los filtros amorosos ni a los talismanes astrológicos tanto el hombre como la mujer disponen de medios propios, de fuerzas irresistibles que emanan de su ser". 

"Enamorados", apela entusiasmado, "aprovechad debidamente esta fuerza y lograréis vuestros propósitos más allá de vuestras esperanzas".


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Cómo sabemos que es amor y no estamos confundidos








Qué hay entre un hombre y una mujer - Eva Boland

 

Sala Canal, Madrid nov 2025

Cuarentena

Eva Boland 


En la peor hora de la peor estación

del peor año de todo un pueblo

un hombre sale de su taller con su esposa,

él caminaba - ambos caminaban - hacia el norte.


Ella estaba enferma por la fiebre del hambre y no podía mantenerse en pie.

El la levantó y se la echó a la espalda.

El caminaba hacia el oeste y el oeste y el norte,

hasta que al anochecer llegaron bajo las estrellas de helada.


Por la mañana fueron encontrados muertos,

de frío. De hambre. De las toxinas de toda una historia,

pero los pies de ella se mantenían contra el pecho de él

el último calor de su carne fue su último regalo para ella.


No dejes que ningún poema de amor llegue a este umbral.

No hay lugar aquí para la alabanza inexacta

de la gracia fácil y de la sensualidad del cuerpo.

Sólo hay tiempo para este inventario sin piedad:


Su muerte juntos en el invierno de 1847.

También lo que sufrieron. Cómo vivieron.

Y qué hay entre un hombre y una mujer.

Y en qué oscuridad se puede demostrar mejor.




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Enamorarse mejor - Miguel Pita. Genetista

 

Exposición Alonso Mañés - Bib. Regional Joaquín Leguina, Madrid 2025


Maribel Orgaz @leerenmadrid
Miguel Pita es genetista y ha publicado un libro, El cerebro enamorado (Periférica) acerca de los cambios hormonales y cerebrales que se producen desde que sentimos un flechazo hasta que nos separamos.

"El amor", afirmaba en una entrevista, "juega con dos cartas, el premio del placer y el castigo del dolor. Cuando se va tu pareja y estás enamorado la ansiedad es elevadísima". 

¿Podemos enamorarnos menos o enamorarnos mejor?, le preguntó el entrevistador.

"Al final", explicaba, "lo que hace que te enamores menos también es biológico (...) Hay que asumir que en el cerebro hay cosas que ocurren que no podemos controlar, y punto".


Nadie ha entendido el querer 

es dulce como el almíbar 

y amargo como la hiel. 

Copla




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El deseo de ser visto





Bailando en la pradera - Una fotografía de Julián Collado

 

Fotografía: Julián Collado


Maribel Orgaz @leerenmadrid
El otro día, en el pasillo de esa casa de comidas llamada El Fogón verde encontré esta fotografía de Julián Collado de principios del siglo XX.

En Madrid, en ese tiempo, a los madrileños les encantaba bailar. Se bailaba en los Jardines de Apolo (en la calle Fuencarral), en los de Portici, en ambigús, en salones, en merenderos, en salones de esgrima, en teatros, había sociedades de baile. 

Y había también bailes en la pradera, ha explicado la escritora Mariblanca Caneyro. El verano, un tamboril y una flauta eran suficientes para bailar al aire libre en la Pradera del Corregidor, de los Guardias, en la Fuente de la Dorotea.

Los bailes de moda eran los pasodobles, las jotas, el chotís, habaneras, can-can y como se lamentaba un periódico de la época "el indefinido". 

Julián Collado era un fotógrafo aficionado, apenas salió de Albacete y fue impresor y también funcionario. 


Por la calla abajo,

baja un limón de mil colores,

en la puerta que se pare

allí tengo mis amores.

[canciones de ronda]



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La fiesta de la eterna admiración 




El deseo de ser visto, de ser amado - Inma Rubiales

 

Bolsa de reparto. Calle Hortaleza, Madrid. 2017


Maribel Orgaz @leerenmadrid
¿Cómo no iban a ser tendencia las novelas de amor? ¿Qué hay más humano que el deseo de ser visto? ¿De ser amado? ¿Cómo no íbamos a poner en valor la novela romántica? Si se escribe sobre el amor, igual que se escribe sobre la vida y la muerte, desde los inicios de la literatura. Si el amor, por mucho que intenten hacernos cree que no, todavía está por todas partes. Si abrir una novela y verse reflejado en esas páginas, para nosotros, para los románticos, para los optimistas, para los que buscamos un refugio en los libros, es como oír una voz que te susurra "bienvenido a casa". Inma Rubiales, escritora. 

Inma Rubiales publicó su primera obra en 2019, es autora de varias novelas. La cita es del periódico El País, 1 de noviembre de 2025.



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Un matrimonio que fue siempre un noviazgo



El amor, un lugar donde puedo ir - Olvidados entre libros

 



Maribel Orgaz @leerenmadrid
El amor, escribe este lector anónimo, es un lugar donde puedo ir. 

Acudí, hace unos días, a la exposición Entre páginas en la Biblioteca Municipal Pedro de Lorenzo de Soto del Real (Madrid). 

La muestra estaba organizada por la librería solidaria AidaBooks que había recogido durante años postales, invitaciones de boda, poemas de amor, listas de la compra, entradas de cine, billetes de tren, que lectores anónimos habían olvidado entre las páginas de los libros que habían donado a su proyecto.

Y había también poemas de amor, "¿quién no los ha escrito alguna vez", decía una de las cartelas, "y quizá un poco avergonzado los había guardado en el libro que estaba leyendo".

"Un túnel de luz", había copiado diligente el lector de la fotografía en la cita sobre el amor del libro que estaba leyendo, "para tener otra vida en los cubículos de mis horas".


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Cómo sabemos que es amor y no estamos confundidos 



Los enamorados se regalan manjares - Margarida y Andoni, amores medievales

 




Maribel Orgaz @leerenmadrid
Teresa Vinyoles, de la Universidad de Barcelona, recoge una historia de amores medievales en la ciudad. 

Margarida y Andoni se veían desde hacía dos meses en la catedral y según parece, se miraban profundamente los días festivos y los no festivos. 

Él decide pasear por la calle en donde ella vive, ella le sonríe desde la ventana, él la saluda con el sombrero.

Una mañana, él entró en su casa y ella le declaró su amor. Se despidieron dándose la mano.

Al día siguiente, él envió un criado para pedirle una cita, ella le regaló una langosta y se citaron aquella misma noche.

Tras la cita, él le mandó peras, melocotones y queso. 

Privarse de alimentos servía para evitar el deseo, intercambiarlos un símbolo de amor, explica la historiadora catalana. 


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Por qué un abrazo debe durar un poco más




Un gran amor, algo raro y maravilloso - Maurizio Ferraris, filósofo

 

La Lectura, periódico El Mundo

Maribel Orgaz @leerenmadrid
El filósofo italiano Maurizio Ferraris vino a Madrid al Festival de las Ideas, el pensamiento sale a la calle. El periodista Daniel Arjona, le entrevistó para el suplemento cultural de el periódico El Mundo, La Lectura y una de las preguntas se refería al sentido de la vida, al sentido del mundo: ¿encontraremos alguna vez un sustituto eficaz de la religión?

"La religión", respondió, "es un camino que muchos siguen, en parte porque ya está trazado. Pero el sentido también nos lo puede dar la convicción de tener una misión en la vida, o un gran amor, algo raro y maravilloso".



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Ella hace una señal y comienzan los bosques - Emily Dickinson, poemas

Un proyecto común, una filosofía de vida afín - María Saavedra, psicóloga


Paseo de Recoletos. Madrid


Maribel Orgaz @leerenmadrid
La psicóloga María Saavedra, especializada en terapia de parejas, fue entrevistada en el periódico El País con motivo de San Valentín. Saavedra proponía como regalo un obsequio emocional, por ejemplo, una carta manuscrita.

¿Cómo se vive el amor hoy en día?

Llevo desde 2011 investigando relaciones sexuales, afectividad y relaciones de pareja y veo que están condicionadas por la superficialidad, el ritmo de vida y las relaciones esporádicas. Internet y las redes sociales han generado la idea de que vale más la cantidad que la calidad. Ahora todo es más efímero. No existe un esfuerzo, una profundidad. Si pasan unos meses y la expectativa de cada uno no se cumple, se abandona.

Además de la superficialidad, qué otros problemas son frecuentes.

En general, hay mucha rabia. Encuentro mucha infidelidad, etapas de crisis. Hay parejas que discuten muchísimo, que vienen de separaciones y divorcios, se rejuntan y se encuentran con que no se ajustan adecuadamente con los hijos. Veo situaciones en las que uno de los miembros tiene depresión o ansiedad y está afectando a la pareja. Otros vienen porque han perdido el deseo.

¿Qué debería tener una relación para funcionar?

Un proyecto en común y una filosofía de vida afín son básicos. Hace falta intimidad, es decir, que cuando las dos partes hablen lleguen a profundizar, y también es imprescindible la atracción física, que muchas veces desaparece. La sexualidad es muy importante, hay que plantearse cuánto tiempo ha pasado desde la última relación, cuánto tiempo hace que no me río y me lo paso genial con mi pareja. Se finge mucho.

¿Qué opina de San Valentín?

Cuando se vive en pareja, la pregunta que hay que hacerse es cuánto tiempo dedico al día a mi pareja. Hay quienes dedican demasiado tiempo, mental o real, y quienes dan muy poco pero esperan mucho. San Valentín busca que prestemos atención al amor, pero concentra todos los días del año en uno solo. Eso crea demasiadas expectativas en quienes necesitan sentirse queridos, que solo esperan el regalo; y también genera la tendencia, que se da sobre todo en hombres, de sentirse obligados a regalar.

¿Pero tiene sentido celebrar el amor?

Creo firmemente en él y es una herramienta muy potente. El amor nos ayudaría a que todos estuviésemos más cercanos, rompería la individualidad. Muchos problemas como la pereza, el egocentrismo o el egoísmo social disminuyen cuando hay amor. San Valentín estaría bien para mandar cariño, por eso nos podríamos plantear hacer regalos emocionales (...) una carta donde cada uno expresa sus sentimientos, una presencia, algo sencillo y cotidiano. No se necesita la superficialidad. San Valentín es sinónimo de superficialidad y de obligatoriedad y eso se puede transformar. Todos tenemos la capacidad de coger esta fecha y cambiarla en algo que al otro le haga sentir bien, porque al final la pareja consiste en que las dos partes se hagan mejores personas. Una relación consiste en que cada uno como persona se sienta bien consigo mismo.

Fuera de San Valentín, qué se puede poner en práctica.

La comunicación es fundamental, al igual que la empatía, es decir, la capacidad de ponerse en el lugar del otro y darle el tiempo que necesita. Eso es paciencia. Es necesario entender que no hay que dar todo a la otra persona. Cada uno tiene que tener su espacio privado. Hay que ser espontáneo y natural, mostrarnos tal y como somos. Eso es muy difícil, pero con esfuerzo se puede lograr.

Las crisis de pareja no son más que oportunidades para transformar un cambio, opina la psicóloga. “Todo se puede trabajar y todo tiene solución. Si nos quitásemos cosas externas nos acordaríamos de lo importante, de lo básico, de los pequeños detalles”. Recomienda un ejercicio de “desapego material”, deshacerse de las cosas que hacen excesivamente cómodo el día a día, para salir de la zona de confort. “En cuanto alguien llega a tu vida y te saca de tu zona de confort, la gente se niega. Buscamos siempre el confort y eso es peligroso. Requiere un esfuerzo, pero es que en las relaciones hay que esforzarse”.

Quizás sea el simple amor por la vida y todo lo alegre - Madrid, ciudad del amor... y no París






Maribel Orgaz @leerenmadrid
Hace un tiempo escuché en un programa de radio una noticia curiosa:


Las parejas españolas son las más románticas del mundo, se besan más que ninguna otra en el mundo, se abrazan más que ninguna otra del mundo y les encanta mostrar en público su amor... Y lo decía Chrisanna Northrup, después de haber hecho un gran estudio con miles de parejas en decenas de países.

¿Buscas el amor? Ve a España, instaban blogueros por todas partes. Así que, es Madrid y no París la ciudad del amor. "Quizás sea el simple amor por la vida y todo lo alegre", afirmaban. 
  

Lutero y Catalina - El paisaje moral del Barroco. Amelia Valcárcel - Museo del Prado



Maribel Orgaz @leerenmadrid
En esta conferencia de la filósofa Amelia Valcárcel, sobre el paisaje moral del Barroco, la conferenciante se detiene unos momentos para narrar la historia del matrimonio entre el teólogo Martín Lutero y Catalina de Bora, a quien él llamaba cariñosamente Señora Caty (Frau Käthe).

"Lutero, un hombre de fe absoluta", continúa Valcárcel, exclaustra monjas porque cree que eso no está en las escrituras y por tanto no tiene razón de ser como tampoco el celibato.

Estas monjas que eran pobres viven, al exclaustrarse, en una casa y se van casando.

"Él era cuarentón", dice Valcárcel, "y quedaba una monja llamada Catalina, y la pide, por favor, que se case, que se sirve mejor a Dios en el matrimonio".

Catalina responde que él dé ejemplo (23,10`) y Lutero responde con sinceridad que, con la vida que ha tenido, ni lo había pensado. Entonces ella le propone que se case con él.

"Se esperaba", cierra la filósofa, que después de lo que habían hecho sus hijos fueran deformes y en cambio tienen seis completamente sanos, "estupendos".

«No cambiaría a Catalina por Francia o por Venecia, porque Dios me la ha dado a mí y otras mujeres tienen peores defectos.» Martín Lutero. «Doy más crédito a Catalina que a Cristo, que ha hecho mucho más por mí.» Puedes leer con más detalle sobre su matrimonio aquí. 



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Cómo sabemos que es amor y no estamos confundidos - Lyubov, amor en ruso, Atlántida Films - Staffan Julen, Svetlana Aleksiévich

Lazos de amor - Mirador del embalse de El Atazar, Madrid



Maribel Orgaz @leerenmadrid
He vuelto al mirador sobre el embalse del Atazar, el pantano más grande de la Comunidad de Madrid, en estos días de tanta lluvia para ver cómo estaba su nivel. 

El mirador es un voladizo sobre este mar de agua dulce y a los enamorados les parece un buen sitio para sus candados, desde allí pueden cumplir con su ritual de arrojar la llave al agua.

"Los candados están diseñados para ser duraderos y firmes, para mantener dos cosas unidas con seguridad y esto se traduce fácilmente en un ritual sobre el amor, el compromiso y la memoria". Loneyplanet.

Cada vez hay más candados pero en esta ocasión había una novedad: muchos lazos azules, rojos.  

Me gustan estos alegres atrapavientos de amor.  

El escritor Miguel Ángel Núñez explicaba: 

"un lazo es para atar y fijar pero no es un nudo, porque un buen lazo se puede desatar, de otro modo no sirve. Así es el amor, un lazo invisible que une y mantiene a una pareja juntos, que hacen un pacto y están dispuestos a seguir pese a las dificultades".


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Vivir en los lugares que él crea - Sylvia Plath en Benidorm (Alicante, España)


Todo el día juntos, en casa, en la Dehesa - Veranos en Soria, Julián Marías y Dolores Franco - Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla, UCM

 


Maribel Orgaz @leerenmadrid
Hasta el 30 de abril, en la Biblioteca Histórica de la UCM se expone parte del legado del filósofo Julián Marías. Es una muestra llena de afecto y admiración y en ella se han incluido fotografías familiares de sus hijos y su esposa, Dolores Franco.

"Conoció a su esposa Lolita Franco durante los estudios en la Universidad Complutense de Madrid, tratando de temas filosóficos, preocupaciones de la juventud: justicia social, transición política, liberalismo, democracia, etc., amistad que se plasmó en matrimonio ejemplar. Tuvieron 5 hijos: Julián, el primogénito, que falleció a los 4 años, Miguel, Fernando, Gabriel y Álvaro. Fue un hombre totalmente enamorado de su mujer. De él es esta frase: “mi mujer fue lo más importante de mi vida”, a su muerte ocurrida cuando él estaba en el extranjero, escribió: “ha desaparecido mi proyecto vital de tantos años, lo que le había dado sentido a mi propia vida. Ya no soy yo, ni mi casa es mi  casa”. Esta frase, tantas veces repetida tras quedar viudo en el año 1977" RACVE. 

Los veraneos en Soria eran extraordinarios (...), todo el día juntos, en casa, en la Dehesa, con Lolita día y noche. Los desayunos con fruta, churros y buen café, en una habitación inundada de sol, todos reunidos, eran de una alegría sólo ensombrecida, para Lolita y para mí, por un recuerdo que nos manifestábamos.



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A mi puerta llama la vida - Fernando Aramburu y Gabriel Pape